Humbelina Garza de Garza

Humbelina Garza de Garza, born on July 8, 1935, in a world that would transform greatly throughout her lifetime, passed away on December 19, 2024, in Houston, Texas. Humbelina was a woman tremendous strength and faith in God, whose unwavering spirit touched the lives of many around her.

Humbelina was preceded in death by her parents and her beloved husband, Candelario Garza.

She leaves behind a loving family that includes her sons Erasmo Garza and his wife Camila Garza, Enrique Garza and his wife Ofelia Garza, Ernesto Garza, Eden Garza, and Eduardo Garza and his wife Sandra Garza. Humbelina also cherished her daughters, Elida Rodriguez and her husband Alberto Rodriguez, Elsa Del Angel, Eva Mendoza and her husband Alex Mendoza, and Esmeralda Elizondo. Her legacy continues through her 23 grandchildren and 24 great-grandchildren, who carry forward the values of love, faith, and strength she instilled in them.

In her passing, we remember not only the loss but the vibrant life she led. Humbelina's faith and resilience serve as an inspiration to all who had the privilege of knowing her. She has now gone to rest with the Lord, leaving behind cherished memories that will forever be etched in the hearts of her family and friends.

Humbelina Garza de Garza, nacida el 8 de julio de 1935, en un mundo que se transformaría enormemente a lo largo de su vida, falleció el 19 de diciembre de 2024 en Houston, Texas. Humbelina fue una mujer de tremenda fuerza y fe en Dios, cuyo espíritu inquebrantable tocó la vida de muchos a su alrededor.

Humbelina fue precedida en la muerte por sus padres y su amado esposo, Candelario Garza.

Deja atrás una familia amorosa que incluye a sus hijos Erasmo Garza y su esposa Camila Garza, Enrique Garza y su esposa Ofelia Garza, Ernesto Garza, Edén Garza y Eduardo Garza y su esposa Sandra Garza. Humbelina también apreciaba a sus hijas, Elida Rodríguez y su esposo Alberto Rodríguez, Elsa Del Ángel, Eva Mendoza y su esposo Alex Mendoza, y Esmeralda Elizondo. Su legado continúa a través de sus 23 nietos y 24 bisnietos, quienes llevan adelante los valores de amor, fe y fuerza que ella les inculcó.

Con su fallecimiento, recordamos no solo la pérdida, sino la vida vibrante que llevó. La fe y la resiliencia de Humbelina sirven de inspiración a todos los que tuvieron el privilegio de conocerla. Ahora se ha ido a descansar con el Señor, dejando atrás recuerdos preciados que quedarán grabados para siempre en los corazones de su familia y amigos.